No seremos nosotros quiénes descubramos las bondades de los Aceites de Oliva y en particular del Aceite de Oliva Virgen Extra.
Eje estructural de la “dieta mediterránea”, el AOVE supone un alimento único que no sólo destaca por sus propiedades “organolépticas” sino que además encierra multitud de parabienes para el cuerpo humano.
Son multitud los estudios realizados que lo certifican como un excelente aliado contra la arterioesclerosis, convirtiéndolo además en un gran protector frente a enfermedades cardiovasculares. No en vano, la propia FEC (Fundación Española del Corazón) señala que, el AOVE favorece el correcto funcionamiento del aparato circulatorio reduciendo la aparición de trombosis.
A esto debemos añadir sus propiedades antioxidantes para prevenir el envejecimiento celular, su alto contenido en Vitamina E, o su efecto positivo en el control de la diabetes, entre otras muchas virtudes.